La Asociación Nacional de Periodistas del Perú, a 41 años de los luctuosos hechos en Uchuraccay, reafirma su convicción y firme compromiso de luchar por verdad y justicia en este caso, la primera matanza colectiva de periodistas, en el anhelo de lograr un país más justo.
El caso Uchuraccay es una causa que debe ser ampliamente convocante en una patria que ha padecido el horror de la muerte y la impunidad. El caso Uchuraccay son los ocho periodistas, el guía y el comunero, pero también el centenar de uchuraccaínos asesinados en el periodo de violencia en el país. Todos son víctimas. Víctimas que han sufrido la indolencia de un Estado que no fue capaz, ni antes ni ahora, de garantizar acceso a la justicia, que ha revictimizado, que se mantiene reacio a cualquier posibilidad de cerrar una herida abierta. Una herida abierta no solo para los familiares de los periodistas y el gremio periodístico, una herida abierta para aquellos peruanos y peruanas dignos, que no quieren vivir en un país que desprecia la vida.
Este 26 de enero encuentra a la ANP, como todos los años, en su peregrinación a Uchuraccay, en un acto de memoria que pretende recordarle a Ayacucho y al Perú, que hace 41 años en las alturas cordilleranas de Uchuraccay, 8 periodistas y un guía nos legaron la más excelsa lección de lo que es hacer periodismo: ir en búsqueda de la verdad.
Las nuevas generaciones de periodistas, pero también las nuevas generaciones de peruanos y peruanas, tienen el deber de conocer lo que pasó en Uchuraccay. La memoria también dignifica, la memoria es una expresión de justicia social que arropa a las familias que hoy como ayer, a escala intergeneracional, permanecen comprometidos en la médula en esta batalla colectiva por justicia.
La ANP continuará firme en este andar. En momentos en que el periodismo confronta crisis de diversa índole, casos como el de Uchuraccay no solo congregan, también interpelan. Los 26 de enero no dejarán de ser fechas de dolor, pero a la par han sido, son y serán de protesta. Por la indolencia, por el letargo. La voz valiente de la ANP se seguirá escuchando en plazas, universidades y en la propia Comisión Interamericana de Derechos Humanos, donde yace el caso desde hace más de una década. La ANP demanda tres cosas: el allanamiento del Estado Peruano, el reconocimiento tácito de una verdad irrefutable: no haber garantizado acceso a la justicia y la implementación de políticas públicas para que en nuestro país no se vuelva jamás a asesinar a un periodista.
El tiempo transcurrido sin justica no desalienta. La valentía ha ganado el pulso. La lucha por verdad y justicia ha trascendido, en el gremio, en las familias, que unen nuevas generaciones a este caminar.
Que el legado de los Mártires de Uchuraccay sea esa búsqueda de la verdad tan necesaria para mantenernos del lado de la gente.
¡Seguimos luchando por justicia y verdad!
¡Mártires de Uchuraccay, presentes!
26 de enero del 2024
COMITÉ EJECUTIVO NACIONAL
Matriz histórica del movimiento organizado de los trabajadores periodistas, fundada el 21 de julio de 1928. Afiliada a la Federación Internacional de Periodistas (FIP).